Amigos lectores reproducimos el editorial del diario El Nacional publicado el día de hoy sobre el devastador informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos sobre el estado de los derechos humanos en Venezuela, lo que nos lleva a denunciar que desde ayer el Delta Amacuro ingresa en la lista negra de gobiernos regionales que violan los derechos de los ciudadanos como la libertad de expresión, de pensamiento, etc, por el cierre del programa del señor Hugo Salazar, que a decir de algunos ingenuos fue a consecuencia de suspuestos elementos desconocidos, pero por lo obsevado, coincidencialmente sale del aire justamente después de la intervención de los autores de este portal ayer a la 7 am. De modo, que digan lo que digan los justificadores oficialistas, lo cierto es que en el Delta la intolerancia, el odio, la persecución por motivo políticos, el abuso de poder y la corrupción se adueñan de los estamentos gubernamentales en detrimento del derecho de los deltanos a oir, leer y ver ideas distintas a la propaganda de Lizeta Hernández y sus cómplices.
Lean el editorial in comento:
"Informe devastador. Ante la rotunda y muy bien fundamentada denuncia presentada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, sobre las graves y continuas violaciones a los derechos civiles de los venezolanos, el Gobierno bolivariano se quedó sin argumentos de peso para responder a la magnitud del señalamiento. Como siempre, han salido al ruedo con las gastadas acusaciones en el sentido de que existe una conspiración internacional contra el Gobierno de Venezuela, y que la CIDH es pro golpista porque se definió, supuestamente, a favor de Carmona en los hechos de 11 de abril, lo que es totalmente falso porque, entre otras cosas, la Comisión Interamericana no actúa en su conjunto con esa inmediatísima y urgente celeridad que se le pretende atribuir. Pero los embusteros del Gobierno no tienen otro argumento político, o más bien propagandístico, al cual echar mano para enfrentar el peso de uno de los informes de la CIDH más prolijo, documentado y rotundo que haya producido la comisión en los últimos años.
Desde luego, existen antecedentes y muy valiosos, pero si se entra en la página de Internet de la comisión se descubre el avance de la modernidad tecnológica al servicio de la verdad y de los derechos humanos. Por ejemplo, no sólo se colocan a la disposición de los ciudadanos los textos de los documentos, las entrevistas y el resto de las evidencias, sino que se colocan en pantalla los audios y videos de las intervenciones públicas del Presidente de la República y de sus ministros, en las cuales se amenaza, se ordena perseguir y reprimir a los venezolanos que critican o se oponen a las políticas del gobierno bolivariano.
Si alguien de Ecuador, México, Argentina o España, etcétera, quiere ver cómo el Presidente de Venezuela amenaza y ordena condenar, de viva voz, a la jueza que simplemente cumplió con los trámites legales en el caso de Eligio Cedeño, si le apetece comprobar si alguien ordenó gas del bueno contra las manifestaciones pacíficas de los estudiantes, pues bien, en la página de la CIDH están colocados los videos originales de VTV y Telesur, en los cuales se demuestra que sí fue así y que no se trata de una vulgar manipulación. El mandatario nacional y sus cercanos colaboradores se acusan inexorablemente a sí mismos a través de las imágenes. Esto constituye un paso importantísimo en la profundización histórica de las denuncias de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que tradicionalmente han sido objeto de ataques y censuras de parte de los gobiernos latinoamericanos, entre ellos Colombia y Venezuela, que se ganan la copa a la hora de despotricar contra la CIDH.
Pues que con su pan se lo coman, porque los ciudadanos latinoamericanos ahora acceden a una información que no puede ser impedida por los cuerpos de seguridad. Como pronosticamos los periodistas ayer, el Presidente no tuvo más remedio que anunciar que el Gobierno venezolano renuncia a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Otro escalón hacia el sótano de la historia."
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