La flamante "Casa Socialista Ramón Antonio Yánez", no es más que el uso abusivo del erario municipal al servicio de la candidatura de Yelitze Santaella a la Gobernación del Delta Amacuro. Mientras el alcalde despilfarra el recurso de los deltanos, los trabajadores de la Alcaldía de Tucupita nos escriben para denunciar la falta de pago de sus salarios, lo que los lleva junto a sus familias a pasar hambre y necesidades.
Con la presencia de los acólitos del alcalde de Tucupita, principal operador político de Yelitze Santaella, se inauguró la "Casa Parroquial Socialista" con el nombre de "Ramón Antonio Yánez", ubicada justamente al frente de la plaza Delfín Mendoza de esa Parroquia. Hasta aquí la información reseñada por el diario Notidiario el día jueves 27 de octubre de 2011 parecería normal y aparentemente vendría a ser un acto más propagandístico de los que nos tiene acostumbrado los inútiles que manejan el poder el Delta, incluyendo al alcalde de Tucupita. Pero al analizar los pormenores de la noticia, nos damos cuenta que estamos frente a un gran abuso del poder y los principales responsables es Alexis González, el Alcalde de Tucupita, Yelitze Santaella, porque estaba de primera invitada, y demás funcionarios públicos, incluyendo al propio Ramón Antonio Yánez, que si bien no tiene cargo público conocido, se ha dado a la tarea de propalar que el encarna la moral en persona, cuando todos en el Delta sabemos los pingues negocios que está levantando a costillas del erario regional, de modo que no es el santico que nos pintan sus adláteres.
El lugar llamado "Casa Socialista" es una simple inauguración de una sede del PSUV en la urbanización Delfín Mendoza, y para colmo el titular del periódico nos dice que estamos en presencia de una pila de bandidos que usan el presupuesto de los deltanos para ponerlos al servicio de las pretensiones de Yelitse Santaella de volver a sus anchas a la Gobernación de Delta.
Si ustedes revisan la fachada de la casa supuestamente socialista, fuimos y lo hicimos y además tomamos fotos de la misma, nos daremos cuenta que es el uso de los dineros públicos, dinero del Municipio, para colocarlo al servicio de una facción del PSUV liderada por Yelitze Santaella y el alcalde de Tucupita, este último ya perdió la brújula y lo que queda es halar bolas para continuar chupando. Esta inauguración es un abuso de poder y presuntamente están incursos en delitos contra la cosa pública, pero en Tucupita, debido al letargo que se vive, nadie se da cuenta de estos despropósitos de Yelitze Santaella y sus hala bolas.
En conclusión, esta inauguración es una cínica, vulgar y buerda maniobra política que sólo busca sembrar lo necesario para defenestrar a la ciudadana gobernadora del Delta Amacuro, para ello, harán todo lo que hay que hacer y gastarán lo que nos les pertenece para que la señora investigada varias veces por el Ministerio Público, imputada por delitos de corrupción, vuelva a postularse como gobernadora del Delta. Dios nos agarre confesados, porque si bien la actual mandataria no es una angelita de la caridad, imagínese el regreso de la Emperatriz de Clavellia. Desde esta trinchera la combatiremos así como a su cómplices chavistas y los que están infiltrados en la oposición, ellos saben perfectamente que los tenemos identificados.